Coco.

Coco. Una absurda/maravillosa fantasía musical.

Cuando ves a un niño que lucha por conseguir su sueño,  y ese sueño es la música, no haces sino emocionarte desde el primer momento con esta historia. No subestimes el poder de la música (frase lapidaria de Star Wars, otorgando desde el primer momento a la música una suerte de energía). Hemos disfrutado con la película Coco, escuchando en la cinta música tradicional mejicana, latin-jazz, grupos de mariachis, la marimba al aparecer los pétalos mágicos de la flor de muertos, la voz, la trompeta y sobre todo la guitarra, instrumento mariachi y base del folclore mejicano, jalonado todo con constantes golpes de humor.

Frida Kalho no podía faltar, derramando color y creatividad. Las tradiciones mejicanas sobre el culto a los difuntos (centrados en el día de muertos) son la base de la película, y sobre ellas descansa lo demás: altares familiares, ofrendas, velas, fotografías (imprescindibles), mausoleos, fuegos artificiales, maquillaje y decoración de esqueletos, la flor de muertos (cempásuchil), los alebrijes (figuras fantásticas de cartón decoradas, tratadas como guías espirituales),  y el perro xoloitzcuintle, adornando el paisaje.

Es una fantasía entrañable sobre la familia y la memoria de los seres queridos ya fallecidos. Nuestra memoria solo se puede transmitir entre los vivos: así surge un mundo paralelo a la tierra de los vivos: la Tierra de los muertos, e incluso un mundo dentro de ese mundo: la Tierra de los “Casi Olvidados” donde ocurre la desgracia de la muerte final, es decir, el olvido completo. Si no queda nadie con vida que te recuerde en el mundo de los vivos, desapareces. Los muertos mueren definitivamente si se les olvida.

Las canciones son maravillosas: Recuérdame, Un poco loco, Juanita, el Latido de mi corazón, la Bikina, el Mundo es mi Familia, la Llorona. Además, la película tiene cantidad de frases memorables que hacen pensar:

Sobre el valor de la familia:

·         Nuestra memoria solo se puede transmitir entre los vivos.

·         ¡Estoy feliz de ser de su familia!

·         En este mundo los recuerdos mueven todo.

·         ¡La familia es primero!

·         Nada es más importante que la familia.

O sobre el aprovechamiento del tiempo y el usar el propio talento:

·         Depende de mí conseguir ese sueño, capturarlo y ver que se cumpliera.

·         La vida es un momento, no puedes dejar que se vaya.

·         ¡La música es lo único que me hace feliz y tú quieres quitarme eso!

·         Vive tu momento.

·         Somos artistas, el mundo es nuestra familia.

Es en definitiva, un canto a la unión familiar en estos tiempos en los que la familia está siendo tan maltratada. Observamos tristemente  a ancianos abandonados en residencias (o peor, en la calle), gente dispuesta a sacrificar a su familia por la fama o el dinero, falta de autoridad de los padres en casa... Y cuando la familia vive tanto desprestigio, surge la película “Coco”.

En la historia, la lápida del texto del monumento a Ernesto de la Cruz dice: Saber aprovechar la oportunidad. Después, tras el desarrollo de la historia, lo cambiarán por: ¡Te olvidamos!, parafraseando la hermosa canción Recuérdame, pero dándole la vuelta. Humor hasta el final. No te olvidamos, Coco.

Francisco Amós Tomás Pastor