La musicalidad de la lengua rusa

Pushkin reflexionó, y dijo a Glinka:

-"Claro que la lengua rusa tiene musicalidad. Su música es como plomo hirviendo pero también rebosa de los sonidos de los bosques de coníferas en la quietud del invierno. Cálido y crujiente, como el manto marrón que cubre la tierra en otoño, y contundente como el viento que azota furioso la estepa, y posee el calor de la llama que nunca se apagará, o la frescura de las orillas del mar Negro en primavera. A los extranjeros les suele desagradar nuestro idioma. Incluso hasta los polacos tratan de disimular cierto gesto de contrariedad al escucharnos, pero su musicalidad es tan fea o hermosa como podemos serlo nosotros mismos, y nuestras tradiciones con esos cuentos de magos, brujas, y cabezas sin cuerpo. No tendremos un Moliere ni un Shakespeare, si siquiera un Byron, pero tenemos historias que contar”.

Glinka a Pushkin: -“Y una música rusa que las cante”.

Sinfonía de la mañana 11/10/18 Martín Llade


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