Nueva metodología en la cuarentena.


Con la asignatura de música me encuentro con que la forma de dar clase la tengo que modificar totalmente. No había mandado deberes para casa hasta ahora. Solo para actividades de informática musical que  hacía una o dos sesiones por trimestre. Ahora todos los deberes son para casa. El trabajo era 100% presencial, porque se baila, se canta, se toca la flauta. En los ensayos de flauta progresamos en la técnica instrumental, en la participación grupal, en la audición en conjunto durante un concierto de las obras interpretadas. Una correcta interpretación de música en clase depende directamente de los ensayos, y por tanto, de la asistencia a clase. A pesar de que creo que los chicos no saben trabajar en casa (porque no les hemos enseñado, estando siempre quitando deberes para casa para no agobiarlos) habrá que acostumbrarse. Y adaptarse al momento, y sacar nuevos materiales, que los hay. Y crear un flujo constante entre el profesor y el alumno a través de internet que antes no necesitábamos. Y esto lleva su adaptación. Poco a poco, con paciencia, solucionando los problemas de cada alumno caso por caso.

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